Humberto Vacaflor Ganam
Quizá haya que agradecer a Evo Morales por haber provocado que los bolivianos se unieran, contra su gobierno, pero que se unieran y decidieran crear una nueva Bolivia.
No importa lo que digan algunos medios y gobiernos despistados del exterior que hablan de golpe de Estado: la verdad es que Bolivia ha vivido la más hermosa insurrección popular de su historia.
Ya quisieran los cubanos, venezolanos o argentinos tener una insurrección que los libere de sus dictaduras como la boliviana.
El periodista Rafael Archondo definió muy bien esta situación: los bolivianos estamos como una mujer violada a la que no le quieren creer.
Es la culpa del sistema de información. De tanta información que hay en las redes, resulta que nadie sabe lo que ha pasado.
No importa. Ya aprenderán.
Por el momento, esta experiencia equivale a que todo un país haya cambiado de piel. A Bolivia le ha nacido la piel de la nación boliviana, que tanto se había demorado. Ahora ya nadie puede hablar de dos Bolivias; ni siquiera de un país plurinacional: ahora hay una Bolivia.
La señora cruceña que dijo la semana pasada que le iba a añadir chuño a su majadito sintetizó toda esta idea y la llevó a la mesa. Un camba convertido en líder de la revuelta y recibido en La Paz y El Alto como héroe. O un paceño como Carlos Mesa que recibe en Santa Cruz el mayor porcentaje de su votación.
Los motoqueros de Cochabamba convertidos en héroes que defienden a su ciudad ante las hordas de los cocaleros asesinos, o los jóvenes cruceños que se organizan para la defensa de sus barrios, los tarijeños que enseñan a la gente a hacer una protesta pacífica, los potosinos premiados en su heroísmo cuando el dictador renuncia el 10 de noviembre, los orureños, los sucrenses, los riberalteños, camireños, vallegrandinos, tupiceños… todos.
Un país paralizado por decisión de su gente. No por decisión de maleantes que quieren habilitar pistas clandestinas para la salida de la droga, como ocurrió en 2003, sino ciudadanos que quieren habilitar una pista que permita la salida del dictador.
Y el dictador se fue. Muy apurado por su cobardía.
Ahora está en el reino de los cárteles de la droga. La Transnacional del Crimen Organizado tiene una tarea para él. Pero le reprocha haber huido tan aprisa.
Siglo21bolivia.com
2 comentarios
Con todo lo que pasó y aún sigue… Me dan más ganas de ser entendido en materia de derecho, ciencias políticas y todo lo que abarca ese campo profesional ya lo considero una pasión. Aunque soy más entendido en lo técnico-tecnológico muchas felicidades a Humberto Vacaflor Ganam por compartir cosas que muchos no conocemos, pero queremos aprender. Muchas gracias y muchas felicidades saludos
Gracias Raúl por el mensaje. Mi Mac Pro estaba con problemas y ahora quiero mandarle un saludo cordial. Humberto Vacaflor