Humberto Vacaflor Ganam
Después del foro internacional de la democracia, convocado por Joe Biden, se produjo el foro de las autocracias: China, Rusia, Cuba, Nicaragua, Venezuela y Bolivia.
No es motivo de orgullo que el MAS haya inscrito al país en ese foro, en que los países compiten por saber cuál de ellos tiene más presos políticos.
Una competencia en la que, para comenzar, se puede decir que a Bolivia no le va muy mal, sobre todo por los presos militares que tiene.
En la cabecera está China. Tiene 9.116 presos. Para sus 1.400 millones de habitantes, es una tasa inferior a la boliviana.
El régimen comunista chino mató el 4 de junio de 1989 a 2.700 jóvenes en la plaza Tienamen, según cifras de la Cruz Roja, aunque otras cifras hablan de más de 10.500. Y hay denuncias de que el régimen ordena la extirpación de órganos de algunos presos, algo que en Bolivia no se ha dado todavía: sólo hay golpizas, como la que recibe Jeanine Áñez y recibió Marco Pumari al ser detenido, igual que Yassir Molina.
China es la estrella del grupo de las autocracias. Pero tiene competidores que no se resignan a ser segundones.
Los rusos tienen 420 presos políticos en cárceles de la Siberia, con dietas de hambre, casi tan graves como las que recibe la señora Áñez.
Cuba es la estrella latinoamericana en este concurso:
Oficialmente, el gobierno cubano ha admitido tener 4.500 presos políticos. … De esta cifra alrededor de 3.000 son calificados de “contrarrevolucionarios”.
La isla tiene 11 millones de habitantes pero tiene la mitad de presos que China, con una gigantesca diferencia de población. Eso es un récord apreciado en el club de carceleros.
Venezuela tiene 264 presos políticos, no mucho, pero en cambio ha logrado expulsar del país a 6 millones de personas, un gran mérito para el club, aunque menor al de los cubanos.
En Nicaragua hay reconocidos 160 presos políticos, de los cuales casi 20 eran candidatos que no pudieron participar en las elecciones pasadas.
Y la dictadura boliviana no está muy lejos. Aparte de los presos políticos, como Áñez, Pumari y Molina, hay 3 almirantes, 2 generales, 25 oficiales y 125 suboficiales de las FFAA, en un total que va creciendo según aumenta la furia del cocalero Morales por su error de escapar en 2019 e interrumpir su dictadura. Podía haber estado compitiendo con Putín, Xi Jimping, Ortega, el ahijado de los Castro y el chofer de Chávez.
Con los policías que el cocalero quiere presos, las cifras de Bolivia podrán mejorar mucho y dispararse con los cívicos que están en la lista negra.
Cuando Bolivia haya retornado al club de la democracia, la lista de presos la tendrá la Interpol, y el principal de ellos estará en Guantánamo.